28.12.06

ambientes

a una familia



Si bien la creación de los ambientes, habitaciones en otros léxicos, o también cuartos, se remite a la necesidad de dividir al hogar en aquellas partes en las que se realizarán distintas y diferenciadas actividades; en el caso de la familia Milicich se encuentra la excepción a la regla.
Mientras se pueden encontrar cacerolas flotando en la bañera y apio descansando en alguna almohada, en la cocina duerme la madre y la abuela hace sus necesidades en el dormitorio del hijo menor. La ropa para secar está colgada en los clavos en los que debería haber cuadros, y aquellos están fuertemente ajustados a la soga del lavadero por varios broches. El padre pasea de un lado a otro de su habitación, intentando ubicar su parte trasera en alguna de las hornallas de la estufa para poder leer el diario.
Cenar nunca fue tan divertido en algún otro lugar, dado que aquí se hace en la ducha, rodeado de plantas y ropa doblada y planchada. La televisión emerge del inodoro del baño de la dependencia, mostrando las noticias a un intrigado tío que toma el café sentado sobre el lavarropas en funcionamiento, en alguna de las habitaciones; ya no se sabe cuál.


Los radiadores, ubicados en el techo, a veces funcionan mal y enfrían en vez de calentar; pero todo se arregla cuando el hijo mayor toma las bolsas de consorcio y las utiliza para taparse mientras estudia psicología, con la camisa al revés y la corbata en la cabeza, tirado sobre la mesa del comedor diario, la cual en realidad está en el hall de entrada, junto al botiquín de primeros auxilios y la cama de la hija del medio.

El balcón, poblado de platos, cubiertos y vasos, vajilla, para resumir; se ve visitado por el hijo menor para escapar del estruendo que hace el ascensor al pasar por la puerta principal y salir por la ventana de la habitación de los padres. La hija del medio lo acompaña, y le cuenta que algún día conseguirán ese perrito que tanto desean, que le pondrán de nombre Tiberio y que le construirán una casita en la terraza, junto a la biblioteca, la pecera y el lavatorio del baño elegante.

27.12.06

vainilla (tentadora)

los últimos rayos del día más largo del año son el marco perfecto para esperar esa tentación veraniega. tirado en el pasto, sólo oigo los zumbidos de las abejas que se acercan lentamente a las flores. ellas también sienten esa tentación, la que se percibe por los colores, olores y sabores del solsticio.

mi piel hierve y exhala cada gota de deseo que esconde mi cuerpo. con el calor estival emergen todas las fantasías que durante el año hibernan; y ese mareo, ese mareo de la insolación no es nada comparado con lo que me preparo a recibir con las tentaciones de diciembre.

el amarillo parece estar por todas partes, haciéndome creer rodeado de llamas solares. las abejas danzan absorbiendo el néctar que las flores ofrecen. y polinizan, infectan con vida otros cálices, y yo quiero ser polinizado, sentir ese agitar de alas transparentes y ver de cerca las franjas coloridas. quiero recibir un golpe de vida y salir del letargo.

cuando me levanto mis pies se sienten vacíos, hechos de aire. el vértigo infernal nubla mis sentidos y caigo, caigo porque la tentación tocó a mi puerta. no creo ser lo suficientemente fuerte como para resistirla.
pocas veces -o muchas- tenemos la oportunidad de negarnos a algo que ansiamos. ¿seguir el instinto como los insectos o aguardar mientras las nubes se arremolinan y se engrosan dentro nuestro? ya los truenos resuenan en mi propia tormenta, en mi propia tempestad, ¿y obviar todo eso?
en el estío el néctar se transforma en miel, el deseo se convierte en dulce impulso y el pensamiento se canaliza en precipitación. este ocaso de canícula terminará con la caída de las gotas, pero el cielo estará completamente limpio.

15.12.06

chocolate granizado (redundante)

"No tengo miedo a morirme,
más miedo tengo a enfermar
y yo no quiero dejar de disfrutar lo que enferma."

pensar. pensar te lleva a seguir pensando, porque es lógico que pensar te haga pensar más detenidamente en lo que estabas pensando anteriormente. inclusive, pensar en cosas ilógicas termina indefectiblemente en pensar en por qué estabas pensando en esas cosas sin sentido. y cuando lográs descifrar el por qué, te ponés a pensar en el para qué.
conseguir un para qué no significa el final del pensamiento. el pensamiento continua eternamente, porque es como un espiral, como una corriente que te arrastra a seguir pensando en por qué querías conseguir ese para qué de ese por qué, que había surgido originalmente de un pensamiento ilógico.
indudablemente te terminás encerrando en una especie de tela de araña de la cual te vas a tener que librar de alguna manera. ¿y qué mejor manera para hacerlo que pensando? obviamente, indudablemente, vas a terminar pensando en la manera de dejar de pensar en todo y de escapar de tus propios pensamientos.
pensás en callarte y quedarte en silencio, en aislarte completamente, porque la soledad ayuda. pero, ¿para qué ayuda? para pensar más detenidamente en las cosas. entonces pensás en la posibilidad de empezar a correr, a gritar y hacer ruido, porque es lo opuesto a la tranquilidad que te permite pensar, pero terminás pensando en si realmente va a funcionar y si estás haciendo las cosas correctamente.te decís a vos mismo - o pensás - que no importa el error, que de alguna manera vas a dejar de pensar, pero caés en la cuenta de que en ese mismo momento estás errado y ya estás pensando. imaginás tu situación como un laberinto en el cual, para escapar, debés atravesar paredes, pero, ¿cómo hacerlo si están hechas del mármol más resistente? pensás que hay una manera de traspasar el obstáculo, pero te quedás pensando en cómo deberías hacerlo, cuando en el fondo sabés que la única manera es ir corriendo contra todo, sin que te importe nada.
mejor dejo de pensar en qué estarás pensando al leer esto y pensando '¿en qué habrá pensado éste cuando pensó esto?' y tan sólo lo escribo, pero escribir me lleva a pensar, y pensar... pensar simplemente me divierte, en el fondo.


11.12.06

sambayón (amargo)

'es que la frustración te paraliza y no te deja pensar claramente las cosas.'
sí, es posible, pero tenés que dejar de pensar, así es como se va la frustración.
'vos no te das cuenta lo difícil que es, vos no estás frustrado.'
claro, pero podría estarlo. hay tantas cosas que me podrían llegar a frustrar...
'¿sí? ¿como qué?'
no sé... el calor, la humedad, el precio de los restaurantes... son muchas las cosas frustrantes de este planeta.
'ja, pero esas son cosas triviales. yo te pregunto a VOS, en especial, ¿qué es lo que te frustra? me acabás de dar una respuesta muy generalizada.'
puede que tengas razón... a ver, dejame pensar... me frustra mucho no saber las cosas, creo. esa sensación de saber que pasa algo, pero no saber qué.
'te molesta no poder controlar todo.'
no, no es eso. me molesta no saberlo todo. que pueda o no hacer algo al respecto, me importa muy poco, sé mis limitaciones, pero me gusta conocer todos los aspectos de las situaciones.
'está bien eso, que puedas reconocerlo.'
igualmente, también sé que si logro conocer todos esos aspectos, mis posibilidades de hacer algo al respecto se amplían enormemente. al mismo tiempo, creo, me gusta controlarlo todo, pero eso quizás le pasa a todo ser humano.
'hay personas que se contentan con poco. yo no siento que mi frustración pase por no poder controlarlo todo, por ejemplo.'
¿no? ¿a qué se debe tu frustración, entonces?
'y... es medio complicado...'
dale, no des vueltas.
'me frustra que la gente no me tenga en estima. creo que podría llegar a hacer lo imposible para gustarle a las personas.'
bueno, no es TAN complicado. yo aprendí, a lo largo de la vida, que hay personas que simplemente no se las puede ganar, y no es la muerte de nadie no caerle bien a alguien.
'bueno, pero yo no entiendo eso. lo sé, pero no lo entiendo. cuando alguien me mira mal, me empecino en hacer cosas para caer bien.'
¿y te frustra? no es como la frustración que me contabas antes, que te dejaba paralizado.
'no, esta es distinta. es una frustración que me empuja a hacer cosas. sería como opuesta a la otra.'
y la otra, ¿por qué se genera?
'por cosas que no puedo controlar. también, son muy triviales, pero así me tienen.'
¿alguna en particular?
'la lluvia, por ejemplo. no se puede escapar facilmente de la lluvia, y eso me frustra.'
te produce impotencia, el no poder hacer nada al respecto.
'claro, la impotencia me frustra.'
sí, a mí también... la impotencia viene en forma de gotas, últimamente.
'¿te parece?'
totalmente. ya sea lluvia, rocío o lágrimas, ahí está la impotencia.
'puede que tengas razón...'

8.12.06

caminante

Qué asco que me doy.


Si sentís que se avecina la tormenta,
¿por qué seguís caminando?
Y si ves que los pájaros esperan
sentados sobre el cable,
viendo y esperando el aguacero,
¿por qué continuás?

Más allá de que ayer haya sido precioso,
de que el Sol haya tostado tus mejillas,
tus muslos, tu frente, tu nuca,
hoy estalla el temporal,
y si vos sentís el viento
y las hojas y el polvo en tu piel,
¿por qué perseverás obstinadamente?

Sabés que es inminente,
conocés el desenlace y el final,
con la estrepitosa caída de las gotas,
pero seguís esperanzado
con cambiar las consecuencias.

Si sabés que la Vírgen no te puede ayudar
porque la viste descansando sobre un polvoriento altar,
¿por qué te entregás al martirio
de avanzar bajo la presión del próximo chaparrón?

Y si te bañás de las gotas de rocío
esparcidas en el aire,
cargadas de nefasta magnificencia,
de la asesina culpa de no llevar un paraguas,
¿por qué demonios no buscás un techo?
¿Por qué no te alojás bajo el abrigo de un árbol,
de una montaña, de un edificio inclusive?

Si el dolor de tus músculos es enorme,
como el pisoteo inaguantable
de una maza sobre tus huesos,
por la infinita marcha
bajo el incierto y puntual advenimiento
de la destructiva tormenta de tu voluntad,
¿por qué soñás con estar cerca de destino
y proseguís con esa ilusa caminata?

No te entiendo, y menos lo hacen ellos.
Sos un soñador en medio del huracán
y por esa ilusión te podés matar.

Sin embargo, la venda en tus ojos;
tus ojos ciegos, blancos de pasión;
te deja volar lejos,
atravesando la cortina de vapor tempestuoso,
acercándote a ese destino
que sólo vos conocés.

Te miré desde mi ventana
y pasaste como el sonámbulo más dispuesto.
Te llamé por tu nombre de nacimiento
y no respondiste sino a tu único fin.

Desapareciste, caminante,
bajo la espesa niebla de lo desconocido,

tras el seguro sendero del acantilado.

5.12.06

frutilla (extremadamente rosa)

¿Por qué ella puede usar pollera y yo no? ¿Por qué puede usar maquillaje y yo no? ¿Por qué a ella sí le puede gustar ir a la peluquería, comprarse ropa, y a mí no? Me resulta todo una gran injusticia, yo también quiero ser bonito.

Ella puede usar pantalones, y no me ves mirándola extrañado en la calle. Ella puede llevar el pelo corto, y tampoco me ves espiándola cuando pasa caminando.
Tantos años para conseguir el derecho al trabajo, al sufragio; tanto para llegar a presidenta, pero todavía no se las puede golpear. "A una mujer no se la golpea", ¿por qué? ¿No es eso igualdad?
Ella puede ser obrera, pero yo no puedo ser ballerina. Si se pone a llorar en una película, está perfecto, pero si lo hago yo, soy re-puto.
El equipo de fútbol femenino es respetado, pero el equipo masculino de nado sincronizado, ¿existe?
Ella puede gesticular, usar voz nasal y gritar como histérica. Yo me la re-como.
El ropero de ella es mucho más amplio, con más colores, con distintos estilos, acabados, cortes. El mío: una chomba, un pantalón, un short y un manojo de boxers. Inclusive, ella usa mi calzoncillo, y si yo uso su bombacha, soy un degenerado.
Qué ganas de usar medias y portaligas. Un corset quizás. Pero no, ella puede usar traje y yo no vestido.
¿Perlas? Olvídome, ¿para qué? Ella se apoderó de todas las joyas. Apenas si puedo usar anillo.
Me quiero hacer la manicura, el brushing y la facial, pero ella no me deja, dice que no es para mí. Quiero mi cuarto pintado de rosa y un moño en la cabeza.
Ella jugó con las Barbies Y con los autitos. Si yo tocaba una muñeca, me arrancaban el brazo. Encima de todo, tengo que esconder mi disco de Luis Miguel. Ella puede escuchar cumbia, rap, pop y punk; a mí me tiene que encantar el rock o la clásica.
Si ella habla de la belleza femenina, está todo perfecto, pero si yo hablo de la belleza masculina, me encajan de homosexual. También estoy seguro de que si ella le toca el culo a alguien en la calle no pasa mucho, pero si lo hago yo, me meten una cachetada o un buen puñetazo.
Sólo quiero tomar mi cartera, usar mi minifalda y mis sombras y gritar "¡Soy Néstor, tengo una verdulería y soy varón!"

frambuesa (roja)

"Hipnotismo de un flagelo,
dulce, tan dulce."
..

la sangre, la mordida, la herida de placer. el éxtasis de sentirse desangrado, con el hacha en la yugular, brotando el vital líquido.
los dientes clavados, desgarrando carne y hueso, el canibalismo puro en su más tierna desgracia. los colmillos cortan, hincan, destruyen y beben insaciables.
se agitan lentamente los gemidos, la respiración se acelera y de a poco se funden los cuerpos.
el arma fue la pasión. la herida, una muestra de afecto. la sangre. hay que seguir el camino de la sangre, su sendero sinuoso, dejarse llevar por las emociones oscuras y profundas de la sangre.
un puñal que se hunde y empapa la grama verde con sangre, con su hirviente calor, con su revitalizante pureza. sangre que ve la luz se la bebe la tierra, pero vale más ser muerto desangrado que vivo con ella podrida.
las hojas se tiñen de rojo y rodean la violenta escena en un vendaval. el viento envuelve las magulladuras sobre la piel y las transforma en cicatrices de un romance. los huesos permanecen inmóviles, completamente limpios.

la sangre, la mordida, la destrucción. el brazo ejecutor había dictado su sentencia, y yo caí bajo el peso de su espada. la sangre, el amor; la destrucción, el sadismo. el sendero sinuoso marcó su paso sobre mí.